En un momento de su vida en la que los mejores deportistas del mundo comienzan a bajar el ritmo, LeBron James ha decidido acelerar
James cumplió 38 años el 30 de diciembre, en medio de su 20ma temporada en la NBA. Celebró con 47 puntos ante Atlanta y desde entonces el segundo máximo anotador de la NBA ha lucido como el de antaño.
Promedia 37 unidades, 9,7 rebotes y 8,6 asistencias en la racha de ocho encuentros con los Lakers de Los Ángeles desde que cumplió 38. Ha tenido tres actuaciones de 40 tantos en ese periodo, incluyendo 47 puntos, su máximo número de la campaña, en la victoria obtenida el lunes por 140-132 ante Houston.
Los golfistas viejos se enorgullecen de marcadores que se equiparan con su edad.
James prácticamente está igualando con sus puntos el número de años que tiene ante los mejores basquetbolistas del mundo —e incluso con todo lo que ha hecho para redefinir los parámetros de grandeza, su actual racha es algo especial.
“Está en un ritmo increíble y es evidente”, indicó el entrenador de los Lakers Davin Ham.
James está cerca del máximo anotador en la historia de la NBA de Kareem Abdul-Jabbar mientras carga sobre sus espaldas buena parte de la responsabilidad en unos diezmados Lakers, al menos hasta que Anthony Davis se recupere de su última lesión.
Y el astro lo ha hecho a pesar de los recordatorios de su edad.
Con mayor regularidad James ha estado jugando ante a los hijos de jugadores a los que enfrentó al inicio de su carrera, incluyendo los jóvenes Jabari Smith Jr. y Kenyon Martin Jr. de los Rockets.
“¡Hey, jugaste ante mi papá en tu primer encuentro de la NBA!”, le dijo Smith Jr. a James en la cancha, en un diálogo que capturaron las cámaras de NBA TV.
“Me hizo sentir extremadamente viejo cuando Junior me dijo eso”, aseguró James con una sonrisa. “Creo que incluso lo dijo, como ‘debes sentirte viejo’”.
Tanto Smith Sr. como Smith Jr. estuvieron en las gradas observando a sus hijos —y el hijo de James, Bronny de 18 años, asiste a la misma secundaria de Los Ángeles en la que jugó Martin Jr. James ha enfrentado a otro excompañero de Bronny, Zaire Williams de Memphis.
“Es simplemente algo único el haber soportado el paso del tiempo como lo hice, poder competir contra una combinación de padre e hijo”, sentenció James.
Una noche antes de que saliera encendido ante los Rockets, James llegó a 38.000 puntos en su carrera en la derrota 113-112 ante Filadelfia.
La victoria ante Houston arribó en su 1.400 encuentro, la 11ma mayor cantidad en la historia de la NBA. Y si se mantiene saludable, podría alcanzar el récord de 1.611 partidos de Robert Parish cuando expire su contrato con los Lakers en el 2025.
Listín Diario
