El brindis es un momento especial en toda celebración. Sin embargo, en las fiestas, algo más se suma, algo más lo envuelve y este ya no es un brindis igual a cualquier otro. Tiene algo de esperanza, de agradecimiento, de celebración, de deseo.
Un momento así exige siempre su tiempo y su espacio, su orden, sus palabras y sus risas, donde familiares y amigos celebran estar juntos, celebran estar allí en ese momento presente y se encomiendan al futuro.
Un brindis es, por supuesto, aquel momento de la celebración en que los invitados alzan sus copas y las entrechocan al tiempo que se manifiestan buenos deseos. Se trata de una costumbre asumida por multitud de sociedades y países, una forma de compartir la felicidad y alegría de estar juntos.
El acto de brindar, aún extendido a muchas culturas del mundo, y con sus particularidades en cada una de ellas, tiene un proceder y un significado colectivo.
Origen del brindis
El origen del término se remonta al siglo XVI y tiene como motivo la celebración de una victoria del ejército de Carlos V sobre Roma. Al tomar de forma victoriosa la ciudad y saquearla, cuenta la historia que los mandos militares llenaron sus copas de vino, las alzaron al frente y dijeron la frase: “bring dir’s”, que procede del alemán y significa “te lo ofrezco”. Este hecho, ha dado lugar a la tradición de brindar cuando se celebra algo.
Sin embargo, el propio acto de brindar se remonta mucho tiempo atrás y, se cree, se realizaba por motivos diferentes a los actuales. En tiempos de la antigua Grecia y la antigua Roma del siglo IV a.C., era un método habitual de asesinato el envenenar las copas. En las celebraciones y reuniones se brindaba, entonces, para chocarlas y que el contenido pasase de un recipiente a otro, como muestra de confianza.
El brindis en distintos países
Cada país presenta sus particularidades al brindar y ello hace de cada brindis uno especial:
En Alemania, mientras se brinda, es importante mirarse a los ojos. Además, obligatoriamente tiene que sonar el cristal al brindar y es considerado de mala educación volver a llenar el vaso si aún no se ha vaciado. Por su parte, la forma de hacerlo es diciendo alegremente: ¡Prost!
En Argentina, solemos considerar como mal augurio el brindar con la copa vacía o con agua. Y, al igual que los españoles, de quien heredamos la costumbre de brindar, ofrecemos nuestros mejores deseos junto a un sincero ¡Salud!
En China, las copas deben llenarse hasta al borde y luego ser bebida completamente. A la hora de brindar, consideran muy importante el no alzar la copa por encima del anfitrión o la gente mayor presente en la mesa, sino se percibe como un acto de descortesía. En chino mandarín la frase para brindar es ¡Gan bei!
En Francia, también mantienen el contacto visual. Sin embargo, nunca llenan la copa por encima de la mitad y la beben moderadamente a ligeros sorbos. No falta, por supuesto, un enérgico y alegre ¡Santé!
El protagonismo de la sidra y el champagne
La sidra y el champagne son, en nuestro país, las bebidas más frecuentemente elegidas al momento del brindis.
La sidra es una bebida que se obtiene por la fermentación alcohólica del jugo de las manzanas, con o sin la adición de jugo de peras, en una proporción menor al 10%. Generalmente, las que se comercializan en los mercados suelen tener un mínimo del 4% de alcohol, excepto las sidras sin alcohol que pueden contener 0.5% como máximo. Además, puede tratarse de sidra natural o gasificada.
Elaboración del champagne
El champagne, por su parte, es un tipo de vino espumoso. Se trata generalmente de un vino blanco, aunque también existe el champán rosado. Este último es elaborado a partir de varios tipos de uva, la mayoría tintas.
Para la elaboración de champagne pueden emplearse tres variedades de uva: la Pinot Noire, Pinot Meunier y la Chardonnay. Las dos primeras son uvas tintas, mientras que la última es blanca. Cada una tiene su aporte especial: la Pinot Noir aporta al vino cuerpo, carácter y longevidad; la Pinot Meunier tiene menos carácter que la anterior y proporciona un sabor afrutado; la Chardonnay confiere al vino ligereza y frescor.
Un momento especial
Con sidra o con champagne, el brindis es un momento especial. Convoca a todos los presentes alrededor de la mesa y nos une en un grito de “salud”, símbolo de amistad, buena voluntad, suerte y prosperidad.
HOSIZONTE A